La Policía gala desmanteló ayer en la localidad vasco francesa de Mauleón un nuevo «zulo» de ETA que había sido encontrado horas antes, de manera casual, por un grupo de excursionistas que buscaban setas. En su interior había material explosivo, varios detonadores, placas de matrícula así como documentación escrita en euskera.
Los hechos ocurrieron a media mañana, cuando el grupo, que caminaba por el bosque de Abailles, próximo a Mauleón, se topó con dos bidones en el momento en que escarbaban la tierra en busca de setas. Al infundirles sospechas, pusieron los hechos en conocimiento de un puesto cercano de la Gendarmería. Tras comprobar que, en efecto, se trataba de un «zulo» de ETA, los agentes de este Cuerpo militar pasaron la investigación a la Policía Judicial de Bayona. Un equipo de desactivación de explosivos procedió a primera hora de la tarde a extraer el material, que estaba oculto en los dos bidones de una capacidad de 200 litros. En su interior, los terroristas ocultaban una significativa cantidad de material para confeccionar explosivos, así como detonadores, placas para hacer matrículas falsas y documentación, al parecer manuales escritos en euskera. Según las primeras investigaciones, el material se encontraba en buen estado aunque, al parecer, el «zulo» no había sido utilizado recientemente. Con el hallazgo de ayer, se eleva ya a catorce el número de «zulos» desmantelados en lo que va de año. Los tres anteriores fueron encontrados el pasado 12 de julio en la localidad francesa de Baigorri, y la pista para llegar a ellos fue un plano encontrado en el despacho de la abogada de Batasuna Arantza Zulueta. Los «zulos» localizados en 2011 vienen a constatar que últimamente no estaban siendo utilizados por la banda —mantiene un alto el fuego—, pero sí confirman que los terroristas conservan su arsenal operativo, lejos de atender los llamamientos para que entreguen las armas.
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